Una Patrona que no quedará en el Olvido

Autor: CARABALLO FDEZ. J.C.
Fuente: Revista Boina Negra nº 280

Patrona de Infanteria en 1957

El 8 de diciembre de 1957 es una fecha para recordar. En esta, Infantes Españoles festejaban su patrona con sudor y sangre en Sidi Ifni, pues estaban inmersos en la guerra que allí se libraba.

En el día de la fecha, se produjo el sepelio de los fallecidos de la 3ª Sección de la 7ª Compañía, en la acción de T´Zelata de Sbuía (Cbo. 1º D. José Civera Comeche, Clp. 1ª D. Ramón Aguirre Eguidúa, Clp. D. Manuel Rodríguez Matamoros, Tte. D. Antonio Ortiz de Zárate y Clp. D. Vicente Vila Plá), siéndole impuesta la Medalla Militar Individual al Teniente D. Antonio Ortiz de Zarate y Sánchez de Movellán, rindiéndole los honores reglamentarios su 3ª Sección (D.O. II Bpac). Posteriormente, se impuso la Medalla Militar Individual al Sgto. Juan Moncada Pujol y la Medalla Militar Colectiva a la Sección.

Sepelio del Tte. Ortíz de Zárate. Foto Archivo BRIPAC

A raíz de la gesta de esta Sección, parte del Ideario Paracaidista cambió, pasó de ser:

«PARACAIDISTA, EL LIBRO DE TU HISTORIA ESTÁ EN BLANCO; NO ESCATIMES TU SANGRE PARA ESCRIBIR EN ÉL PAGINAS DE GLORIA»

a ser:

«EN IFNI SE ABRIÓ EL LIBRO DE NUESTRA HISTORIA, NO ESCATIMARÉ MI SANGRE, PARA ESCRIBIR EN ÉL PÁGINAS DE GLORIA».

Al mismo tiempo, en este 8 de diciembre, la «Operación Gento» estaba finalizando, en la que, entre otras unidades (VI Bandera de la Legión, Regimiento de Infantería Soria 9, II Tabor del Grupo de Tiradores de Ifni n° 1, Regimiento de Infantería Pavía 19), participaron Legionarios de la Agrupación de Banderas Paracaidistas del Ejército de Tierra (Banderas «Roger de Flor» I de Paracaidistas y «Roger de Lauria» II de Paracaidistas).

Croquis movimiento

En esta acción, se rescató a los defensores de las posiciones avanzadas de, Tiugsa (Tagragra)  y Tenín (T´Zenin de Amel-lu).

En ese día tan especial para los Infantes, el Comandante Pallás, al frente de la II Bandera, se encontraba en el puesto de Tenín, el cual había sido liberado la tarde anterior. Había que destruirlo y regresar a la capital, pero las cosas no se preveían fáciles. La intención era desalojar el puesto lo antes posible, para encontrar el menor número de enemigos; pero no se pudo llevar a cabo hasta las 10:30 horas, cuando se produciría un bombardeo de la aviación.

Se inicia el movimiento, siendo el pelotón de destrucciones del Sargento Nogueiras Rodas el último en salir del destacamento, y la 8ª Compañía, al mando del Capitán Román Páez, la que se encargará de proporcionar la protección inmediata y cubrir el repliegue con las Secciones de los Tenientes Gomila Pujol (en vanguardia), García Rodríguez y Colldefors Valcárcel  (en retaguardia). En el centro de la columna irán los heridos, los defensores del puesto con sus familias e impedimenta, protegidos por la 6ª y 10ª Compañías y el Cte. Pallás con su plana.

Al principio, el contacto con el enemigo no era grande, pero, según avanzaban hacia el punto de reunión de la columna, el collado de Mehasaim y la cota 706 (Multah), el combate se intensifica por momentos, hasta el punto de llegar a desbordar a la 8ª Compañía. T´Zenin de Amel-lu era la última posición con tropas españolas asediadas y las bandas rebeldes que habían atacado Tiugsa se reunieron en esta posición intentando envolver y masacrar a los españoles. Para más escarnio, las granadas de mano se acaban, pues la dotación era de cuatro por persona y llevan varios días de operación, siendo el fuego de fusilería insuficiente para contener la ira del enemigo.

La retirada ordenada por saltos que se llevaba ya no es posible, las bajas empiezan a hacer mella en los paracaidistas de la Octava, y el repliegue empieza a ser truculento, arrastrando consigo compañeros heridos y muertos para no dejar a nadie atrás, causando esto nuevas bajas, hasta el punto de que el Capitán Román Páez, con objeto de evitar el desastre, toma la decisión de abandonar con la máxima rapidez aquella desfavorable zona, evacuándose a los heridos que no requerían más que la ayuda de una sola persona (D.O. II Bpac).

Al tiempo que esto ocurría, la I Bandera estaba camino de Sidi Ifni, tras cumplir su objetivo previsto de liberar Tiugsa (liberada el día anterior por la I Bandera Paracaidista, VI Bandera de la Legión, el II Tabor de Tiradores y una sección de morteros del Pavía). Cuando el Tcol. Crespo del Castillo, Jefe de la columna, tuvo noticias de lo que estaban pasando los de la II Bandera, envió a la 1ª Compañía al mando del Capitán Prudencio Pedrosa en su auxilio,  tomando posiciones esta al sur del punto de reunión de la columna, en las alturas del Yebel Bigardern, alzando bien alto su banderín el Cabo Bejarano, para ser visto por sus hermanos paracaidistas e infundirles ánimo.

Sería a partir de las 16:30 horas aproximadamente cuando empezaron a llegar los primeros componentes de la II Bandera, exhaustos y fatigados; sus rostros vaticinaban malas noticas. La 1ª Compañía realizó fuego de apoyo, que hizo desistir a las tropas del Istiqlal de la persecución de los libertadores de Tenín.

En el collado, bajo la guardia y resguardo de la 1ª Cía. y la columna, llegó el fatídico recuento de cinco muertos (Cabo D. José Jardín Martin, Clp. 1ª D. Manuel Albacete Mathe, Clp. D. Pablo Cutrona Sardinero, Clp. D. Fernando Montañez García, Clp. D. Raúl Rodríguez Amado), cinco heridos (Cabo. 1º D. Fernando Clemente Crespo, Clp. D. Andrés Jiménez Gutiérrez, Clp. D. Antonio Arranz Calvo, Clp. D. José Vega García, Clp. D. José Barrios Lázaro) y seis desaparecidos (Clp. D. Abdón Clemente Gallego, Clp. D. José María Jiménez Morales, Clp. D. Domingo Mirando Vidueiras, Clp. D. José Urbano Aragu, Clp. D. Ramón Vilariño García, Clp. D. Diego Zambrano Zambrano).

Traslado Herido. Foto Archivo BRIPA

Tras establecerse en defensiva el total de la fuerza, se evacuan las bajas e impedimenta al poblado de Ait Brahim, hasta que a las 21:30 horas, en un camión del Soria 9, se trasladan a Sidi Ifni.

Las unidades desplegadas hicieron los preparativos para abandonar sus posiciones y regresar a la capital. Dejando hogueras encendidas para hacer creer que estaban en sus puestos; en absoluto silencio, abandonaron estos y marcharon hacia Sidi Ifni, donde llegaron a primeras horas de la mañana del día 9, dando por finalizada la Operación Gento, operación que costó dieciséis vidas desde su inicio hasta este momento.